Ministerio del Espíritu

¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?

Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: SI OÍS HOY SU VOZ, NO ENDUREZCÁIS VUESTROS CORAZONES  Y también el Espíritu Santo nos da testimonio; porque después de haber dicho: ÉSTE ES EL PACTO QUE HARÉ CON ELLOS DESPUÉS DE AQUELLOS DÍAS -- DICE EL SEÑOR: PONDRÉ MIS LEYES EN SU CORAZÓN, Y EN SU MENTE LAS ESCRIBIRÉ, [añade:] Y NUNCA MÁS ME ACORDARÉ DE SUS PECADOS E INIQUIDADES.

Para ser ministro de Cristo Jesús a los gentiles, ministrando a manera de sacerdote el evangelio de Dios, a fin de que la ofrenda [que hago] de los gentiles sea aceptable, santificada por el Espíritu Santo. 

Y el Dios de la esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.

La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros.

En resumen, el Espíritu Santo es esencial en la vida cristiana, tanto en la santificación personal como en la comunión y el ministerio, proporcionando guía, esperanza, paz y una conexión íntima con Dios.